Acerca de la sustentabilidad, el empleo y la pandemia del coronavirus
El impacto del COVID 19 en la sustentabilidad del empleo y en el mundo laboral constituye hoy un enorme desafío en la Argentina; dentro de ese contexto el presente informe tiene dos objetivos.
Por un lado, aportar información sobre el empleo asalariado en Argentina para la elaboración de diagnósticos y potenciales propuestas de soluciones a un problema local dentro de un entorno mundial de incertidumbre económica.
Por otro mostrar que si bien la decisión sanitaria tiene como finalidad reducir o aplanar la curva de contagios, los costos económicos de esta medida van a cobrar cada vez mayor relevancia a medida que los tiempos del aislamiento se alargan, Esto afecta a los distintos sectores según el tipo de actividad y el segmento de la empresa empleadora que toma en considerando la mayor propensión a situaciones de vulnerabilidad en el que las mismas se encuentran aun cuando no hay una linealidad en los efectos que tiene la cuarentena sobre la actividad económica.
Un contexto donde se estima de que cada semana de aislamiento es equivalente a 0,5 puntos del PBI, con una caída proyectada cercana al 9,8 %.
Un análisis que partiendo de la situación macro del mercado laboral en Argentina, tremendamente afectado por la informalidad, irá desagregando sus componentes para focalizar finalmente en aquellos segmentos empleadores que, por actividad, tamaño de la empresa y región podrían verse más afectados por lo prolongado de la cuarentena, la caída de la demanda y la imposibilidad de acceder a fuentes de financiamiento para sostener el negocio.
cada semana de aislamiento es equivalente a 0,5 puntos del PBI
Complementaremos también con una visión regional sobre el impacto del Empleo Público a nivel regional a fin de tener una aproximación de la capacidad en cada provincia de que el empleo privado sostenga al empleo público.
Se estima, solo tomando la foto de las pequeñas y medianas empresas, unos 406.000 puestos de trabajo con altísimo riesgo de pérdida (a los que hay que sumarle otros 600 mil puestos de todas las empresas contratistas que prestan servicios varios a todas las pequeñas y medianas empresas en esa situación (Limpieza, Seguridad, Mantenimiento y servicios varios)
Unos 406.000 puestos de trabajo con altísimo riesgo de pérdida
A ese millón de puestos de trabajo en altísimo riesgo, hay que agregarle dentro del segmento Grandes Empresas, donde si bien la reapertura de las instalaciones con los debidos cuidados sanitarios, fue mayor que en las PYMES, el efecto en la caída de la demanda que podría generará posibles suspensiones o reducciones de la jornada laboral en Industrias como Construcción, Automotriz, Cadenas retail, Electrodomésticos, Hotelería, Gastronomía y entretenimiento lo que afectaría potencialmente a un universo de 258.900 trabajadores directos.
Sustentabilidad, empleo y coronavirus